Para muchas familias latinas, la fe y la espiritualidad son muy importantes. Oramos, leemos las Escrituras y nos reunimos en la iglesia. Estas prácticas nos ayudan a sentirnos fuertes, tranquilos y llenos de esperanza.
Dejar el tabaco no es fácil. Puede hacerte sentir frustrado o con ganas de rendirte. Pero tu fe puede ayudarte a mantenerte firme. Creer en algo más grande que tú mismo puede darte la fuerza para seguir adelante.
Muchas religiones nos enseñan que el cuerpo es un regalo. Es algo especial que debemos cuidar.
Cuando dejas de fumar o vapear, estás mostrando amor por ti mismo, por tu salud y por las personas que te quieren. Eso es un acto hermoso de fe.
No tienes que dejar el tabaco solo. Habla con personas de tu iglesia o grupo espiritual. Ellos pueden:
¿Necesitas ayuda? Llama a la Línea de Ayuda para Dejar de Fumar en Colorado
Si estás listo para dejar el tabaco, puedes llamar a la Línea de Ayuda de Colorado. La ayuda es gratuita. Puedes hablar con alguien en inglés o en español.
Ellos te ayudarán a:
Aquí tienes algunas formas sencillas de usar tu fe mientras dejas el tabaco:
Eres fuerte. Puedes dejarlo. Tu fe y tu comunidad están contigo.
Necesitas respirar aire limpio.
Mereces sentirte sano y fuerte.
Mereces una vida llena de amor, familia y fe.
Deja que tu fe te recuerde: Sí, puedes. Un día a la vez.